Euskadi cierra la Semana Santa con 1.050.000 desplazamientos

La CAE ha superado ligeramente las previsiones en materia de movilidad en Semana Santa, si bien hay que lamentar el fallecimiento de una persona en la red viaria vasca, en Operación Retorno. El pasado 10 de abril, un hombre perdió la vida al volcar su turismo cuando circulaba por la BI-636, a su paso por Bilbao. El pasado año fueron dos las personas fallecidas por estas fechas.

En cuanto al volumen de tráfico en Euskadi, se ha registrado una media de 525.000 desplazamientos de entrada y otros tantos de salida, frente a los 515.000, de media, registrados en la Semana Santa de 2022. Esto supone un incremento de casi el 2%, sin duda, motivado por el tiempo soleado y la ausencia de precipitaciones.

En el paso fronterizo de Biriatou el incremento ha sido aún mayor: un 4,5 % más de desplazamientos que el pasado año. Sin embargo, en lo que respecta a los accesos a las capitales vascas, los flujos de tráfico han sido más similares a los de largo recorrido, al registrarse un aumento de un 2,25 % con respecto a los desplazamientos de la Semana Santa de 2022.

Según la directora de Tráfico del Gobierno Vasco, Sonia Díaz de Corcuera: "El buen tiempo ha motivado un incremento de los desplazamientos con respecto al año pasado, con las retenciones habituales, pero sin problemas reseñables para circular. Por lo que respecta a las víctimas mortales, una persona ha perdido la vida en accidente de tráfico en Euskadi esta Semana Santa, frente a las dos que fallecieron por estas fechas en 2022. Cada víctima supone una pérdida irreparable, por lo que tenemos que recordar la importancia de extremar la prudencia en carretera."

BAJA LA ACCIDENTALIDAD

Díaz de Corcuera ha resaltado que, pese al incremento de la movilidad, ha descendido notablemente el número de accidentes. Este año, entre el 5 y el 10 de abril, se ha registrado un total de 50 accidentes (28 de ellos con víctimas), que han dejado un balance de una persona fallecida y de 2 heridas graves. Esto supone un descenso de la accidentalidad del 38 % frente a 2022, cuando se produjeron 80 accidentes, con dos personas fallecidas y 6 heridas graves.

PUNTOS CRÍTICOS 

Los mayores flujos de tráfico se han registrado en los puntos habituales, con densidades muy similares a las registradas en la Semana Santa del año pasado.

En Bizkaia, las retenciones más importantes tuvieron lugar en la mañana del Jueves Santo 6 de abril, en la A-8, entre Muskiz y Barakaldo, sentido Cantabria, con colas de hasta 15 km, generadas por los flujos de la Operación Salida y acentuadas por un accidente.

El servicio de grúa concertada habilitado por el Gobierno Vasco para el rescate de vehículos accidentados o averiados entre Bilbao y El Haya, realizó 5 rescates (todos ellos por averías), contribuyendo a que las retenciones no fueran mayores.

En Gipuzkoa, el 5 de abril se registraron 10 km de cola en la AP-8, sentido Francia, en el Peaje de Biriatou, por la gran afluencia de vehículos en Operación Salida; también las vías GI-636 y la N-121A se vieron afectadas por estas retenciones. Durante la mañana del Jueves Santo, 6 de abril, se formaron colas de hasta 8 km tanto en el Peaje de Biriatou como en el de Zarautz, sentido Francia.

En Araba, en Operación Salida, en la tarde del miércoles 5 y en la mañana del Jueves Santo 6 de abril, se registraron las retenciones habituales en el nudo de Armiñon, de hasta 6 km.

El 10 de abril, en Retorno, no se formaron colas en dicho punto, gracias a la operativa de señalización dispuesta por el Gobierno Vasco.  No obstante, el incendio de un camión en el Peaje de Altube de la AP-68, en sentido Zaragoza, obligó a cerrar esta salida y desviar el tráfico que regresaba de Cantabria y Bizkaia, dando lugar a ligeras retenciones.

Por otra parte, debido a que el lunes de Pascua también es festivo en Francia, el martes, 11 de abril, en el paso fronterizo se produjeron retenciones de vehículos pesados de hasta 10 km.

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