Un total de 83 municipios de la Comunidad Foral cuentan con sus Planes de Actuación Municipal ante el riesgo de Incendios Forestales (PAMIF), tras la última reunión de la Comisión de Protección Civil de Navarra, celebrada este mediodía, en la que se han homologado 27 planes, correspondientes a las localidades de Arguedas, Allín / Allin, Barañáin / Barañain, Berriozar, Betelu, Castejón, Cirauqui / Zirauki, Dicastillo, Enériz / Eneritz, Estella-Lizarra, Ezcabarte, Irurtzun, Ituren, Iturmendi, Javier, Lesaka, Lumbier, Luzaide-Valcarlos, Mendavia, Milagro, Monteagudo, Odieta, Pamplona / Iruña, Ribaforada, Tafalla, Ujué / Uxue, Zizur Mayor / Zizur Nagusia.
Estos se suman a los 56 aprobados el pasado año en encuentros anteriores de la Comisión de Protección Civil. Asimismo, catorce localidades navarras disponen de planes terminados, a la espera de ser aprobados por los plenos de sus ayuntamientos correspondientes.
La consejera de Interior, Función Pública y Justicia, Amparo López, ha indicado que afrontar el inicio de la campaña forestal de verano con 83 municipios con sus PAMIF homologados refleja "el importante esfuerzo realizado por las entidades locales para la disminución de la vulnerabilidad de su población y protección de sus bienes, mediante la planificación y prevención".
Otros temas tratados
Durante la Comisión, celebrada en la sede de SOS NAVARRA 112, también se ha homologado el Plan de Actuación Municipal ante el Riesgo de Inundaciones (PAMRI) de Buñuel.
Por su parte, y tras la experiencia del apagón del pasado 28 de abril, se ha recordado la obligatoriedad de disponer de un plan de contingencia a las entidades que prestan servicios esenciales. Aunque dichas entidades cuenten ya con ellos, es necesaria su remisión al Ejecutivo foral, quien aprobará dichos planes tras contar con informe favorable de la Comisión.
Los servicios esenciales están conformados por servicios de seguridad (emergencias y orden público); sanitarios (hospitales, centros de salud, transporte sanitario de urgencia, así como compañías de distribución de medicamentos y oxígeno), y compañías de telecomunicaciones, de suministro eléctrico y de combustibles. También tienen esta consideración los servicios de abastecimiento y potabilización de agua, depuración de aguas residuales, bombeos y recogida de residuos sólidos, así como los medios de comunicación para informar a la población.
Fase de implantación de los PAMIF
La homologación es el paso previo a la fase de implantación de los planes, la cual contempla cuatro tipos de medidas encaminadas a reducir las afecciones a la población, a las infraestructuras y a los bienes en situaciones de emergencia producidas por incendios forestales o incendios de interfaz.
La primera de estas medidas es la implantación de una estructura local contra incendios, con recursos propios del municipio, y en caso de constituirse, de los grupos de Pronto Auxilio, formados por personal municipal y por voluntarios, con formación específica en materia de incendios forestales; y las Asociaciones de Defensa Forestal, encargadas de coordinar la realización de cortafuegos, limpiezas preventivas, y otras actividades relativas al mundo agrícola.
El segundo grupo de medidas está destinado a reducir la cantidad de combustible en zonas de interfaz, priorizando la interfaz urbano-forestal (zonas en las que las edificaciones entran en contacto con el monte); y aconsejando medidas para la reducción del riesgo en las de interfaz urbano-agrícola (zonas en las que las edificaciones entran en contacto con el cultivo agrícola).
El tercer grupo de medidas contempla la adquisición de materiales y la mejora de las infraestructuras de extinción de las localidades. Entre ellas, cabe señalar la mejora de las dotaciones, tales como hidrantes, señalización de caminos, etc.
Por último, un cuarto grupo de medidas se centra en realizar acciones de información y formación a la población sobre el riesgo de incendio forestal, así como sobre las medidas de autoprotección que la ciudadanía debe tomar en caso de emergencia por incendio forestal.