María Rivas destaca la importancia del estudio cartográfico para proteger el litoral frente al cambio climático

La subdelegada del Gobierno en A Coruña, María Rivas, presentó esta mañana el ambicioso proyecto "Estudio Ecocartográfico de dos zonas del litoral de A Coruña". El Gobierno de España, a través de la Dirección General de la Costa y el Mar del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, impulsa este estudio con una inversión de 3.349.374,38 euros financiado por el Plan de Recuperación.

"El estudio persigue obtener un conocimiento profundo del medio costero combinando datos físicos y biológicos y culturales con un claro objetivo que es comprender mejor el estado actual de la zona y, sobre todo, cuál es su posible evolución, así como poner en valor nuestros elementos patrimoniales", explicó Rivas quien añadió que "este tipo de estudios complejos y con un coste económico alto no se podrían haber realizado si no fuera por los fondos del Plan de Recuperación".

El proyecto, que tiene una duración de 24 meses, abarca el análisis ecocartográfica de dos grandes zonas del litoral coruñés: desde el Cabo Prioriño Chico (Ferrol) hasta el Cabo de San Adrián (Malpica), y desde el Cabo Fisterra hasta el Cabo Falcoeiro (Ribeira), con una superficie total de 407 km. Es la primera vez que se realiza un estudio de estas características en todo el norte de España y, actualmente, solo se está haciendo un trabajo similar en Tenerife.

Segundo declaró la subdelegada del Gobierno de España en A Coruña, "este proyecto pretende convertirse en una herramienta clave para la planificación ambiental y para tener la capacidad de reacción ante lo cambio climático y sus efectos".

El trabajo, realizado por la UTE formada por GEHYM, TOPCAD INGENIERÍA, HIDTMA y EUROFINS IPROMA, contempla una amplia variedad de trabajos técnicos y científicos, entre los que destacan:

• Levantamientos topográficos y batimétricos para generar modelos digitales del terreno y del fondo marino.
• Estudios morfodinámicos de playas para analizar su evolución y vulnerabilidad ante lo cambio climático para lo cual se tomarán 1.140 muestras.
• Caracterización de sedimentos, comunidades bentónicas y planctónicas, fundamentales para evaluar la calidad ambiental. Están planificadas un total de 803 muestras de sedimento, con un mayor esfuerzo en las zonas de ría y frente a las playas. También se recogerán un total de 1.500 muestras para analizar la naturaleza de la columna del agua y su variabilidad estacional.
• Inventario de infraestructuras, vertidos y caladeros de pesca, con el fin de identificar presiones humanas sobre el ecosistema.
• Estudios del patrimonio natural, arqueológico, histórico y etnográfico, que permitirán poner en valor los elementos culturales y naturales del litoral.
• Cartografía de usos del suelo y hábitats, integrados en un Sistema de Información Geográfica (SIG) de alta resolución. El SIG cumplirá con la normativa INSPIRE.
• Sistema de valoración ambiental, que permitirá clasificar áreas de especial interés ecológico, paisajístico o patrimonial.

Este plan que se dio a conocer coincidiendo con el Día de los Océanos que se celebra el 8 de junio, "es una apuesta muy importante del Gobierno, un proyecto pionero con el que estamos adelantándonos a las consecuencias del cambio climático, conociendo mejor nuestra costa para poder anticiparnos a las consecuencias del cambio climático", declaró la subdelegada.

El estudio contribuirá así a la planificación ambiental, a la conservación del litoral y a la sensibilización social sobre la importancia de proteger un espacio natural, las playas, que también actúa cómo primera barrera frente al cambio climático.