La Real Escuela del Arte Ecuestre lanza un programa de capacitación de jinetes y empresas

El Consejo de Gobierno ha tomado conocimiento de la puesta en marcha del proyecto de acreditación por parte de la Fundación Real Escuela Andaluza del Arte Ecuestre de la capacitación de jinetes de centros o empresas ecuestres internacionales. La Real Escuela ha puesto en marcha una oferta destinada a centros y empresas ecuestres que deseen participar de un proyecto pionero para capacitar a jinetes mediante la aplicación de un programa y una técnica siguiendo los estándares de esta prestigiosa institución.

En este sentido, la capacitación se ha marcado en la adquisición del dominio técnico necesario para la ejecución de reprises nivel San Jorge (etapa media del entrenamiento que incluye ejercicios que demuestran la sumisión del caballo a las exigencias de la ejecución de la equitación clásica y un nivel de equilibrio y desarrollo físico y mental que le permitirán realizar los ejercicios con armonía, ligereza y facilidad). Así, la Real Escuela está ultimando el lanzamiento de su oferta global a nivel internacional, que supondrá un aumento exponencial de la capacitación de jinetes siguiendo sus estándares técnicos.

Con este proyecto se persiguen distintos objetivos como la capacitación técnica para los participantes, a nivel teórico y práctico; la empleabilidad de jinetes profesionales; la valorización del caballo de Pura Raza Española; la transmisión de los valores y pasión por la doma clásica y el alto compromiso ético de trabajo con los caballos.

Para adquirir la acreditación se ha diseñado un proceso que consta de distintas fases. En la primera de ellas se establecen los requisitos de documentación e instalaciones que debe cumplir el centro y se requiere la presentación de una memoria descriptiva del proyecto que se pretende llevar a cabo, incluyendo la propuesta y programa formativo, con información de horas, contenidos y métodos de evaluación previstos. El servicio prestado por la Real Escuela constará de la supervisión documental y física de las instalaciones, para verificar que se cumplen las condiciones requeridas.

La segunda aborda la asistencia técnica de la Real Escuela al centro para la implementación del proyecto, con visitas establecidas de carácter periódico y que pueden referirse a cualquier aspecto del proyecto. Para este fin, aquellos que se acojan a esta oferta deberán facilitar el acceso y visitas al personal designado por la Real Escuela. Por último, la tercera fase consta de la evaluación y validación, realizándose las pruebas finales según los criterios de la Real Escuela y por el personal designado por ésta. A la finalización del proyecto, la Real Escuela certificará que el alumnado ha alcanzado el nivel de equitación previsto.

Esta acreditación por la Real Escuela de la capacitación de jinetes estará limitada al proyecto presentado, no extendiéndose temporalmente más allá del mismo y no autorizándose el uso de su imagen (logos y marcas). Los derechos de propiedad intelectual e industrial de la Real Escuela son de su uso y aprovechamiento exclusivo, sin que pueda utilizarse o difundirse por la entidad reconocida salvo previo consentimiento escrito del legítimo titular.

Durante el proceso de capacitación, las personas participantes adquirirán una serie de competencias técnicas e instrumentales siguiendo la metodología contrastada de la Real Escuela. Inicialmente, el programa se desarrollará durante dos años y para asegurar que el proceso instructivo es parejo para todos los participantes se prevén unas pruebas iniciales de acceso que han de ser superadas. La oferta a nivel internacional se prevé que dé comienzo a principios de 2025, conociéndose ya un interés manifiesto por parte de centros o instituciones de Marruecos, Italia, Francia, México, Nicaragua y Estados Unidos por participar en la misma.

La promoción y participación de la Real Escuela en este proceso de acreditación de la capacitación de jinetes a nivel internacional contribuye a la consolidación del prestigio y del reconocimiento mundial de esta institución como centro de excelencia, como imagen de Andalucía y su marca en el exterior y como defensor del caballo andaluz mediante el fomento el Arte Ecuestre, la ganadería caballar y sus industrias derivadas y su uso como recurso y centro de atracción turístico.