La futura Ley de ciencia contempla la creación del Instituto Andaluz de Investigación Avanzada
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Universidad abre a consulta pública el diseño del anteproyecto de Ley, que mejorará las condiciones de lus recursos humanos y la calidad de las infraestructuras estratégicas
La futura Ley para el Avance de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación para Andalucía (ACTIVA) contempla la creación del Instituto Andaluz de Investigación Avanzada y de las Unidades de Investigación Avanzadas, Competitivas y de Excelencia para situar a la comunidad a la vanguardia en investigación y desarrollo, transferencia de conocimiento y captación de talento. Esta norma tendrá como grandes objetivos fomentar la I+D+I y su transferencia para generar conocimiento y liderazgo científico, mejorar las condiciones laborales de sus recursos humanos y promover la calidad de las infraestructuras y equipamientos estratégicos en esta materia.
La Consejería de Universidad, Investigación e Innovación ha iniciado este 4 de octubre el procedimiento administrativo para desarrollar el anteproyecto de Ley, sometiendo a consulta pública previa la elaboración de dicho texto legal durante un periodo de 15 días. En ese plazo, la ciudadanía en general y los principales colectivos implicados en este cambio legislativo tendrán la oportunidad de realizar sugerencias que serán analizadas posteriormente y tenidas en cuenta, en su caso, en la fase de redacción de la nueva Ley. Esas aportaciones se podrán registrar a través del correo electrónico participa.cuii@juntadeandalucia.es. Para facilitar esta labor, la Consejería de Universidad ha subido al portal web de la Junta de Andalucía https://www.juntadeandalucia.es/servicios/participacion/normativa/consulta-previa.html la resolución con información sobre dicho documento. La previsión es que la futura Ley esté aprobada entre finales de 2025 y principios de 2026.
El Instituto Andaluz de Investigación Avanzada (I2A2), que será un dinamizador esencial del talento y la excelencia, se encargará de captar y retener a investigadores de primer nivel, tanto andaluces como del resto de España y del contexto internacional, en todos los campos del saber para que lleven a cabo su trabajo en instituciones de I+D+I de la comunidad. La finalidad es que se genere el entorno propicio para avanzar en la búsqueda de soluciones innovadoras mediante la investigación de vanguardia a los distintos retos que tiene la sociedad. Junto a este órgano, el futuro marco normativo también contempla la concesión de distinciones o sellos de excelencia a unidades, centros e infraestructuras que desarrollen programas de I+D estratégica altamente competitivos y que se encuentren entre los mejores del mundo en sus respectivas áreas científicas. Se trata de las Unidades de Excelencia en Investigación y las de Investigación Competitivas. Otra novedad que se pretende incluir en ese documento es la configuración de las Unidades de Investigación Avanzadas, que estarán destinadas a fomentar la generación del conocimiento en y entre las universidades.
Máximo consenso en el diseño de la nueva Ley
El Ejecutivo autonómico pretende contar con una norma que nazca del máximo consenso con todos los agentes del sistema andaluz del conocimiento con el fin de que pueda adaptarse a los avances y cambios producidos en el campo científico y tecnológico y promover el progreso y el crecimiento sostenible de Andalucía. La Ley ACTIVA también establecerá mecanismos que promuevan la investigación en todos los ámbitos, tanto en el sector público como en el privado, lo que implicará el apoyo a la creación y consolidación de centros de investigación, el fortalecimiento de la colaboración entre universidades y empresas o la participación activa de todos los agentes del sistema. También se pondrá el acento en la transferencia de conocimientos, tecnologías e investigación al sector productivo, especialmente en lo que respecta a la innovación en las empresas.
De igual modo, otro de los ejes que estructurará la Ley será la atracción de talento y la internacionalización de su sistema científico y tecnológico y para ello se fijarán políticas y programas que faciliten la movilidad de investigadores, la participación en proyectos internacionales y favorezcan la colaboración con instituciones y empresas extranjeras. A esto se suma, igualmente, el respaldo a la estabilización de las plantillas y la renovación generacional.
La Consejería de Universidad se ha marcado como objetivo renovar el actual marco legal regional en materia de I+D debido al tiempo transcurrido, 17 años, desde su aprobación en 2007, y al dinamismo que caracteriza al sector científico, tecnológico e innovador. Esta nueva normativa andaluza estará en consonancia con la que se está diseñando también en la comunidad en el ámbito universitario, la Ley de Universidades Para Andalucía (LUPA), con el fin de que no se produzcan los problemas de interpretación que se están generando en el contexto nacional entre la Ley Orgánica de Universidades (LOSU) y la legislación estatal en materia de ciencia, que fue modificada en 2022.
