"Estamos sabiendo acertar en el camino para conectar lo que necesitan las empresas con lo que necesitan los trabajadores"
El empleo ha tenido un comportamiento análogo al del mismo mes de años precedentes, y nos vuelve a presentar el patrón que venimos señalando mes a mes en el último año y medio: es el septiembre con menor número de personas en paro en septiembre desde 2008 y a la vez el de mayor número de personas trabajando y con derechos en estos quince años. Pero, además, con el mejor dato de Seguridad Social en este mes en las últimas dos décadas. Una muy buena noticia, que no nos hace olvidar nuestras obligaciones con quienes aspiran a ser recuperados para un empleo y que sea de calidad.
Yendo al detalle de los datos, la primera reflexión en este mes es que septiembre siempre ha tenido un comportamiento muy irregular en cuanto al paro, y que ha sido algo más homogéneo en cuanto a la afiliación a la Seguridad Social.
Como ya apuntamos en su momento, el parón veraniego que nos afecta en Euskadi con mayor intensidad ha vuelto a corregirse con una recuperación importante: 1.933 personas menos en desempleo. Casi 40.000 menos desde que arrancó la legislatura, 8.496 más afiliadas respecto a agosto. Casi 57.000 más desde el inicio de la legislatura. Hay una clara recuperación de actividad en hostelería, educación y tareas administrativas. Y destacamos el dato de la afiliación de nuevo para recordar que estamos en cifras extraordinarias, no por ese listón del millón que confiamos en recuperar pronto, sino porque además las jubilaciones están aumentando paulatinamente su intensidad.
Otra cuestión relevante es que el paro desciende en todos los territorios, con más intensidad entre mujeres, pero también entre los hombres, en todos los sectores y en la generalidad de las edades, con una salvedad que se repite también como patrón en este mes. Hay un leve ascenso en el paro juvenil, casi milimétrico con el que se da entre quienes no tenían empleo anterior. Esto nos indica que, a pesar del cese habitual de trabajos temporales propios del verano, ese incremento obedece sobre todo a jóvenes que por primera vez demandan empleo tras haber terminado sus estudios.
Además, es significativo el aumento de la contratación en general, a pesar de que estamos en cifras de máximos en indefinidos. Pero, sobre todo, ese aumento de contratación tiene especial empuje en el formato de indefinidos, casi la tercera parte del total de los nuevos contratos. De nuevo, se demuestra el acierto de la reforma laboral pactada por el Gobierno de España con los agentes sociales.
Por tanto, en visión de conjunto, en septiembre han confluido los dos indicadores básicos sobre la evolución del empleo: descenso del paro e incremento histórico de las afiliaciones. Para nuestro Departamento es un hecho muy relevante, más allá incluso de los buenos datos que nos ha dejado este mes. Y lo es porque significa que a pesar de las incertidumbres, a pesar del reto demográfico, y también a pesar de las dificultades que nos trasladan las empresas para atraer el personal con el perfil que buscan, estamos sabiendo encontrar el camino que ofrece oportunidades y la conexión entre oferta y demanda.
Nuestro compromiso está en seguir profundizando esta vía. La economía nos envía señales en dos direcciones: hay una confianza plena de todos los organismos en la capacidad de España y de Euskadi de seguir creciendo, y somos conscientes de nuestra dependencia del exterior, especialmente de Alemania. Pero las empresas que se dirigen a nuestro Departamento nos trasladan sin excepción la voluntad de contratar, y es la vía que vamos a seguir explorando.
