La Biblioteca de Asturias suma la obra 'La paz armada' a su colección 'Dominiu públicu', dirigida a difundir el patrimonio bibliográfico del Principado
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• Se trata de un artículo del que fuera ministro con Antonio Maura, editado por primera vez en 1889 como discurso de apertura del Ateneo de Sevilla • La publicación se presentará mañana, a las 19:30 horas, en el salón de actos del equipamiento de El Fontán, en Oviedo/Uviéu
La Biblioteca de Asturias Ramón Pérez de Ayala ha incorporado la obra La paz armada, de Joaquín Fernández Prida, a su colección Dominiu públicu, dirigida a difundir el patrimonio bibliográfico del Principado. Se trata de un artículo incluido en los Estudios de Derecho Internacional Público y Privado del político ovetense y publicado por primera vez en 1889 como discurso de apertura del Ateneo de Sevilla.
La nueva edición es un volumen de pequeño formato y presentación muy cuidada que se convierte en el tercer número de la colección Dominiu públicu con la que la biblioteca pone a disposición de la ciudadanía y de las instituciones bibliotecarias y culturales esta obra de Prida, nacido en Oviedo/Uviéu en 1863, catedrático de Derecho Internacional, senador y varias veces ministro en los gobiernos de Antonio Maura.
Fernández Prida analiza en la obra las relaciones internacionales y comprueba que las amenazas de guerra permanentes derivaron en la conversión de los estados europeos en enormes campamentos militares donde los ejércitos nacionales permanentes, cada vez más numerosos y sofisticados, se desarrollaron no sólo para defender la soberanía nacional, sino también para imponer por la fuerza el absolutismo, lo que suponía una carga para los presupuestos nacionales, absorbía el trabajo de millones de ciudadanos y provocaba, al final, un coste social que conducía a la bancarrota.
Al mismo tiempo, constata el crecimiento de una opinión pública que pedía la paz, el desarme y que las relaciones entre los estados se desarrollaran bajo la garantía del Derecho Internacional, área de la que Prida fue catedrático. El político ovetense aboga en su estudio por la existencia de una organización internacional y un tribunal permanentes que medien en las disputas y por alejar las amenazas de guerra continuas y acercarse a la posibilidad del desarme, peticiones que verá años más tarde cumplidas con la constitución de la Sociedad de Naciones (1919) y la Corte Permanente de Justicia Internacional (1921).
La publicación se completa con un prólogo del profesor Carlos Villán Durán, quien participará mañana en la presentación del volumen, junto con el profesor José Antonio Tomás Ortiz de la Torre.
